Con una distribución de más de 100 millones de copias, El camino a la felicidad incluso encuentra su camino profundamente en el corazón del territorio controlado por los rebeldes en el Congo.

Resultados de la Lectura y Uso de El Camino a la Felicidad

“Viví tiempos difíciles cuando me convertí en una víctima de la violencia, cuando mi casa fue bombardeada con bombas Molotov. Perdí mi fe; empecé a sentirme muy deprimido. Fue después de haber leído El Camino a la Felicidad que se revivió mi espíritu. Ahora siento que soy feliz y viviendo otra vez. Puedo recomendar este libro, a todo el que haya tenido tribulaciones y odio, cambiará su vida”. — L.E., Sudáfrica

“Me gusta poder leer este libro y aprender y usar estas reglas para vivir mejor y ser feliz. El Camino a la Felicidad no le enseña a una persona lo que tiene que hacer o no hacer. Me da la idea de una vida contemporánea en circunstancias modernas difíciles. Este libro será de mucha ayuda para la gente rusa; les ayudará a creer en ellos mismos, para encontrar un apoyo. Es muy importante para la gente sobrevivir en las condiciones fatales de hoy en día. Tienen que creer en ellos mismos. Estoy seguro de que El Camino a la Felicidad les ayudará”. — D.G., Moscú, Rusia

“Este pequeño libro es un milagro moral y ético el cual dejaremos caer en el medio de nuestra sociedad esperando que su mensaje sea transmitido a todas los estratos sociales y cada rincón de nuestra tierra natal. No es un mensaje político ni religioso pero si es un mensaje universal. En todas las partes de nuestro país encontramos pasiones, egoísmo y ambiciones que tienden a alejarnos de el camino a la felicidad. Si Colombia aplicara las enseñanzas de este libro, se convertiría en otro país pacífico, honesto y respetable. Y no estaríamos peleando esta sangrienta guerra”. — H.O., Ex Ministro del Interior, República de Colombia

“Su libro, que recibí hace dos horas, está tan repleto de información importante sobre la vida, que paré todo el trabajo y empecé a leerlo inmediatamente. ¡Gracias, gracias! Nosotros ayudaremos a crear un mundo mejor”. — K.G. Micro Salón Centro de Arte, Alemania

En Santa Lucía, los adultos dan un buen ejemplo al ayudar a los jóvenes utilizando El camino a la felicidad

“Le estoy escribiendo para confirmar que he recibido el maravilloso libro de El Camino a la Felicidad. Por favor acepten mi más sincera gratitud por ello. Al leerlo descubrí que es una de las maneras más conmovedoras y afectuosas de hablar acerca de la vida y de la horrible insensatez de la guerra. Mi sugerencia sería imprimir tantos ejemplares del libro como sean posibles en todos los idiomas y distribuirlos a los grupos más amplios de personas en todo el mundo”. — E.K., Embajador, Representante Permanente de Eslovaquia para las Naciones Unidas

“Mi propósito personal al escribir a su Fundación es doble; primero como colega que trabaja en el campo sirviendo a la humanidad; y segundo para compartir con ustedes nuestro agradecimiento por apoyar las actividades de nuestro programa para niños de la calle. Apreciamos su iniciativa en compartir con nosotros los libros de El Camino a la Felicidad durante su visita al programa. Del mismo modo, los mismos materiales han sido endosados como el recurso en nuestro centro de aprendizaje. Los preceptos del libro se tomaron como nuestro recurso al diseñar nuestro plan de estudio acerca de los valores. Encontramos que los valores de sentido común son exactamente lo que estos niños necesitan aprender. Si pudiésemos compartir este material con todas las agencias que trabajan con niños en circunstancias difíciles (niños en guerras, trabajo infantil, etc.) creo que entonces estaríamos alcanzándolos perfectamente”. — E.M., Enfermero Matriculado

“Gracias desde el fondo de mi corazón por un libro maravilloso, El Camino a la Felicidad. Todos mis amigos y yo lo leímos una y otra vez con gran placer. Es una hermosa edición y presenta información valiosa acerca de cómo hacer más feliz nuestra vida. Los mensajes en la publicación son incluso más importantes para nosotros, ciudadanos de la antigua URSS, debido al muy difícil período de nuestra vida por el que estamos pasando ahora. Su libro nos da esperanza para un futuro mejor y esa es su principal ventaja”. — V.A., St. Petersburg, Rusia

“Les estoy muy agradecido por darme la oportunidad de familiarizarme con el libro de El Camino a la Felicidad. Pienso que sería muy útil para que los lituanos reformemos nuestra cultura y da la idea de las relaciones humanas basadas en sentido común mientras estamos en el proceso de salir de la noche comunista”. — Ministro de la Seguridad Social, República de Lituania

Personas de todos los ámbitos de la vida, incluyendo agentes de policía de Colombia, están asumiendo responsabilidad por mejorar sus comunidades con El camino a la felicidad.

“Quiero tomar esta oportunidad y una vez más expresar mi gratitud por su libro El Camino a la Felicidad. No voy a repetirme y citar mi anterior carta en la cual expresé la opinión tan positiva acerca de este libro, aunque creo que es difícil sobrevalorarlo”. — Ministro de Asuntos Exteriores de Vilna, Lituania

“El tema del libro y también su aspecto, nos ha interesado mucho. No hay nada que se compare a esto en Lituania. Por lo tanto, nos atrevemos a decir de El Camino a la Felicidad que vale la pena publicarlo como un libro que promueve los valores entre los jóvenes y los adultos, con el que todo el mundo puede estimar sus acciones y descubrir el significado de la vida”. — D.T. Ministro de Cultura y Educación, República de Lituania

“Apreciamos mucho sus esfuerzos de mejorar la humanidad, proporcionan un mejor futuro a la gente en Ucrania y al mundo. Por educar a nuestra nueva generación en el espíritu de alta moralidad y buena voluntad y por revelar las bases de los valores humanos a nuestra gente, estamos endeudados. Sería maravilloso tener al menos una copia de este magnífico libro en cada escuela y biblioteca”. — Ministro de Educación, Kiev, Ucrania