LA POLICÍA NACIONAL DE FILIPINAS EMPLEA LOS 21 PRECEPTOS PARA RECONSTRUIR LA NACIÓN
Después de enterarse del “milagro colombiano” según el cual la distribución de El Camino a la Felicidad al 20 por ciento de la población colombiana dio como resultado un 62 por ciento de reducción en los homicidios, el filipino Jerry de Tagle vislumbró un plan para llevar este milagro colombiano a su país natal.
Cuando el crimen aumentó un 46 por ciento en el archipiélago de las Filipinas en 2015, la Policía Nacional de Filipinas estaba desesperada por encontrar respuestas para restaurar la paz y seguridad a su población.
Así que De Tagle unió fuerzas con el jefe de la Policía de Davao e impartió su primer seminario de entrenamiento a 45 policías y personal. Un mes después, estos policías llevaron a cabo su primera distribución piloto, llegando a 2000 personas con El Camino a la Felicidad en uno de los lugares conflictivos de crimen en Davao, el mercado de Bankerohan. Esto dio un resultado inmediato con una disminución del 70 % del crimen en el área.
La noticia de la efectividad de El Camino a la Felicidad se difundió entre militares y funcionarios de la Policía de Filipinas quienes insistieron en que el equipo de De Tagle fuera a entrenar a sus soldados y policías. Desde la solicitud del coronel Rodrigo Bonifacio para entrenar a 18 000 guardias de la prisión a las solicitudes de la Brigada 1003 del Ejército, los que se entrenaron en los 21 preceptos empezaron una campaña nacional de El Camino a la Felicidad. De manera similar, en Davao, la policía distribuyó El Camino a la Felicidad de puerta en puerta en los hogares de los traficantes y consumidores animándoles a abandonar las drogas para siempre.
Solo tres meses después de que De Tagle impartiera su primer seminario, 1065 consumidores de drogas y traficantes se rindieron a la policía en Ciudad Quezon. En conjunto, De Tagle provocó una revolución filipina de El Camino a la Felicidad. Se entrenaron más de 7800 funcionarios en el programa, se repartieron 33 000 folletos de El Camino a la Felicidad por todo el país, por medio de la distribución del libro y los medios de comunicación se llegó a más de 6.1 millones de filipinos.
Como resultado, el director general de la Policía Nacional de Filipinas, Ronald de la Rosa anunció que el crimen tuvo una reducción del 49 % en 2016 comparado con el año anterior.
Desde ese momento, De Tagle ha seguido ampliando sus seminarios de capacitación. Más recientemente ha entrenado a 3000 personas, incluyendo a un general, el alcalde, y otros policías y funcionarios del gobierno sobre “Ética para construir una nación”.
Jerry de Tagle se está asegurando de que el impulso creado por los 21 preceptos continúe para llevar cordura a cada área de la nación filipina.
ACTUANDO
Un Nuevo Año de Felicidad Potencial
Un nuevo año está por llegar. Hay muchas acciones que se pueden realizar durante todo el año para aplicar los preceptos de El Camino a la Felicidad y cambia verdaderamente la vida de uno y la de la comunidad. El año pasado la filial de El Camino a la Felicidad de Los Ángeles, estaba decidida a hacer brillar su ciudad natal para los espectadores del Desfile Anual de Navidad en Hollywood.
Es la mayor Celebración de Navidad en EE. UU., atrayendo a más de un millón de asistentes y lo ven millones de personas por televisión. Así que al aplicar el precepto “Protege y Mejora tu Entorno”, los voluntarios organizaron la limpieza de las calles el día antes del desfile. Esto llevó a la ciudad a donar docenas de escobas, palas y otros suministros de limpieza.
Un representante del Consejo Municipal de Los Ángeles se reunió con el equipo para dar la despedida final. Un equipo de 30 personas salieron a las calles con camisetas de El Camino a la Felicidad y llenaron docenas de bolsas con basura y escombros a lo largo de la ruta del desfile. La noche siguiente durante el desfile, millones de personas internacionalmente tuvieron la oportunidad de ver a Hollywood brillar.
DONA
La Fundación de El Camino a la Felicidad Internacional trabaja para revertir la decadencia moral de la sociedad restableciendo la confianza y la honestidad, por medio de una amplia distribución de los 21 preceptos. Las donaciones apoyan la producción y distribución del librito de El Camino a la Felicidad y del material del plan de estudios.